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En estas ocasiones, cada segundo cuenta.

Los drones no tripulados se mueven de manera mucho más flexible, acceden a lugares hasta entonces prácticamente inaccesibles, se desplazan fácilmente por terrenos irregulares gracias a su gran estabilidad y ofrecen visión en gran definición que permiten a los equipos de rescate y de emergencias dirigir a los drones a través de ordenadores portátiles y otros equipos de control.

 

Uno de esos usos por parte de los equipos de rescate es la utilización de drones para las labores de búsqueda de personas desaparecidas.

Uno o más drones de tipo helicópteros pueden buscar personas desaparecidas en lugares abiertos o de difícil acceso como zonas montañosas o nevadas. El reducido tamaño de estos UAV, permite tenerlos siempre disponibles en estaciones de montaña, reduciendo considerablemente el tiempo de búsqueda.

 

El bajo coste de estos drones comparados con el coste de un helicóptero tradicional los hacen idóneos para esta tarea (un helicóptero tradicional es al menos de 30 a 60 veces más caro, y supone riesgo de vidas humanas, alto consumo de combustible, etc).

Nuestros drones permiten a los equipos de emergencia, explorar rápida y eficazmente los incendios peligrosos, observar y controlar un gran incendio, evaluar el fuego para determinar su ruta y velocidad de desplazamiento y cualquier estructura o áreas con un riesgo en la trayectoria de desplazamiento. Esto permite a los supervisores de las operaciones de extinción enviar a sus equipos exactamente donde se necesitan.

 

Ebredrone utiliza varios equipos de manera simultánea, de esta manera se pueden aprovechar las imágenes térmicas para ver a través del humo denso, permitiendo la identificación de determinados puntos calientes y el origen del fuego, o incluso equipos de rescate en situación de riesgo extremo. La combinación de todas estas tecnologías proporcionan los bomberos con información valiosa para ayudarles a tomar las decisiones correctas lo más rápido posible.

 

A demás Ebredrone tiene en personal de vuelo altamente cualificado con alta experiencia en extinción de incendios y trabajo en equipo con los servicios de bomberos, y cuenta con vehículos todo terreno preparados para adentrarse en zonas poco accesibles y así poder prestar un mejor servicio junto con los servicios aéreos.

Contar con un vehículo aéreo no tripulado puede ser útil en misiones de reconocimiento, para planear tácticas policiales, observar instalaciones desde el aire o realizar tareas de escolta a un operativo policial.

Son en particular especialmente interesantes las tareas de vigilancia de fronteras y zonas de acceso restringido, con la posibilidad de establecer una patrulla constante en la zona a proteger y realizar una detección automática de las situaciones de riesgo, disparando una alarma de supervisión manual.

Los drones de rescate de Ebredrone (prototipos utilizados a modo de prueba en playas) vuelan hacia la víctima, reduciendo drásticamente el tiempo de respuesta en primera intervención y se sitúa sobre esta. Inmediatamente, libera uno de los dos chalecos salvavidas, situados en la bahía de carga, que se inflan automáticamente al entrar en contacto con el agua. Cabe destacar que el chaleco permanece unido al drone hasta que el piloto logra entregarlo. Una vez asegurado, se realiza la maniobra de desanclado. Asimismo, el equipo permanece en vuelo estacionario hasta la llegada de los servicios de salvamento y socorrismo.

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